El Pleno de Tudela de Duero celebrado en la tarde de ayer terminó con el abandono del mismo por parte del concejal de Izquierda Unida, Julio Pereda, primero, y de los ediles del PSOE después, a causa del totalitarismo ejercido por el alcalde, Oscar Rodriguez, negándoles el uso de la palabra para contextualizar sus intervenciones en el turno de ruegos y preguntas.
El Reglamento Orgánico de Tudela de Duero estipula que el tiempo de intervención de los ediles de la oposición para cada ruego o pregunta realizada en atribución a las funciones del ejercicio de control y fiscalización de los órganos de gobierno es de dos minutos. Pese a ello, el alcalde, en un hecho sin precedentes al más puro estilo dictatorial, negó ese derecho a los concejales, instándoles a formular el ruego o la pregunta directamente, sin dar opción a argumentar o contextualizar la misma.
El primero en levantarse de la bancada y abandonar el salón de plenos fue el edil de IU, al negársele por tres veces consecutivas su derecho a intervenir para plantear las preguntas de control al gobierno que quería formular. Seguidamente, en el turno de palabra del Grupo Socialista, se repitió la misma negativa, lo que provocó que los concejales del PSOE también abandonaran el pleno solidarizándose con el de Izquierda Unida.
“Es un caso totalitarismo por parte del PP que no debemos tolerar. Es evidente la falta de talante democrático y de transparencia que ejerce este grupo de gobierno”, afirma Julio Pereda. Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista, Alejandro Llanes, se lamentaba de que esta es la tónica habitual, “ya en el primer pleno me retiro la palabra, no responde preguntas y niega espacios a la oposición. Es una actitud inaceptable por parte del alcalde. Tomaremos medidas”, sentenciaba.
TLP - Diputacion de Valladolid 