La moción, que se debatirá el 28 de octubre, exige al equipo de gobierno que asuma sus competencias legales, vigentes desde 2023, para controlar de manera ética la población de gatos callejeros.

El Grupo Municipal Izquierda Unida-Podemos presentará en el próximo Pleno del Ayuntamiento de Laguna de Duero una moción para exigir al equipo de gobierno que asuma «de forma inmediata y efectiva» las responsabilidades legales que le competen en la gestión ética de las numerosas colonias felinas del municipio.

La formación denuncia la «situación de incumplimiento» por parte del Ayuntamiento de la Ley estatal de Bienestar Animal (Ley 7/2023), en vigor desde septiembre de 2023. Esta ley, como recuerda la moción, «atribuye inequívocamente la responsabilidad de su gestión a los ayuntamientos», obligándoles a implementar programas de control poblacional, asumir la atención sanitaria, identificar a los gatos con microchip a nombre del Consistorio y esterilizarlos.

Para IU-Podemos, la «inacción de la administración local» ha provocado una falta de control y concienciación en torno a la población felina, generando problemas de salubridad y conflictos vecinales. En este sentido, recuerdan que las esterilizaciones de gatos pertenecientes a las colonias felinas de la localidad estuvieron paradas durante al menos cinco meses entre 2024 y 2025, en plena época de cría de los gatos, por el retraso de la administración local en resolver la licitación de dicho servicio.

IU-Podemos asegura que esta «dejación de funciones» por parte de las concejalías responsables ha provocado que «la responsabilidad del cuidado, alimentación y atención sanitaria de estos animales recaiga casi de manera exclusiva sobre la buena voluntad de vecinos y vecinas voluntarias».

«Estas personas», subrayan desde la formación, «están asumiendo con sus propios recursos limitados una carga que legalmente corresponde a este Ayuntamiento, sin recibir el apoyo, la formación ni el reconocimiento institucional que la propia ley exige».

La moción de IU-Podemos no se limita a la denuncia, sino que articula un plan de choque con plazos concretos. La propuesta exige la asunción inmediata de las competencias legales y la elaboración de un Programa Municipal de Gestión de Colonias Felinas en un plazo máximo de tres meses. Este programa deberá incluir un censo real, la correcta implantación del método CER (Captura, Esterilización y Retorno) y un programa sanitario completo que incluya la vacunación de estos animales.

Además, se insta a poner en marcha un servicio de urgencia 24 horas para la recogida y atención veterinaria de animales abandonados o heridos, tal y como obliga la ley. La iniciativa también contempla la creación de un Registro Municipal de Voluntarios para proveerles de acreditación, formación, material -como alimento o jaulas- y la cobertura de un seguro de responsabilidad civil, asegurando finalmente una partida presupuestaria específica y suficiente para financiar las medidas acordadas.

«La gestión ética de las colonias felinas no es una opción, es una obligación legal y una inversión en salud pública», recuerdan desde IU-Podemos. «El Ayuntamiento no puede seguir mirando para otro lado mientras los voluntarios y los propios animales sufren las consecuencias de su inacción”.

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